ATERBALLETTO O EL CONTEMPORÁNEO FELIZ
NUOVA HARMONÍA 2017 TEATRO COLISEO
2 y 3 de diciembre 2017
DIRECTOR: Gigi Cristoforetti
Director artístico: Pompea Santoro
Programa
I parte
“LEGO”
Coreografía y vestuario: Giuseppe Spota
Música: Ezio Bosso, A Filetta, Johann Johánsson, Olafur Arnalds, Nils Frahm
“#Hybrid”
Coreografía y vestuario: Philippe Kratz
Música: Romare
[zt_gallery dir=»criticas/031217″ width=»640″][/zt_gallery]
II parte
“Bliss”
Coreografía: Johab Inger
Música : Keith Jarret
Soy una amante de la danza clásica,si bien me apasiona la ópera, es la danza la que me permite la desconexión de la realidad. Un cuadro blanco, de “Lago de los cisnes” por ejemplo, me provoca una sensación de paz mental, la simétrica matemática de los tules deja que mi mente descanse.
¿Qué me pasa con la danza contemporánea? Pues todo lo contrario, “son qual nave ch’agitata” no me deja un segundo de tranquilidad, me requiere un esfuerzo extra para entender y absorber las coreografías, los pasos sorpresivos, la falta de simetrías. Los apuros de mi propia realidad se ven plasmados en cada movimiento, en cada caída, en cada cadena humana que se enlaza sobre el escenario. Es, pues, la complejidad de la vida moderna, las relaciones humanas lo que hace y recrea Aterballetto.
Con pureza técnica en cuanto a la danza, elaboradas coreografías, una selección musical que va de lo moderno al barroco, privando la belleza de la obra, Aterballeto nos incomoda y maravilla. Y de eso se trata la danza contemporánea, ¿no?
Aterballetto es la principal compañía de producción y distribución de espectáculos de danza en Italia, y la más importante afuera del circuito de los cuerpos estables institucionales. Fue fundada en 1979, una larga y exitosa carrera, nacional e internacional.
Actualmente la dirección artística está a cargo de Pompea Santoro.
La actividad de la compañía es posible gracias al aporte institucional de Regiones de Emilia Romagna, de la comuna de Reggio Emilia y del Ministerio de Bienes Culturales.
Cuenta con afamados coreógrafos de la talla de Mauro Bigonzetti, Jiri Kylian, Willian Forsythe, Ohad Naharin y otros.
En su programa disfrutamos de tres obras, cada cual única y cuidada desde lo estético, las luces y proyecciones, el vestuario, maquillaje, el tapete, la escenografía, todo el conjunto suma para que valga la pena el producto.
Lo humano, en cuanto a la excelente técnica del cuerpo de baile, lo humano en cuanto a la selección musical, lo humano en cuanto a las temáticas que se abordaron en cada coreografía. Porque la danza nos habla, pero a veces es difícil tomarnos el tiempo de entenderla.
La mezcla de estilos es equilibrada, contemporaneo clásico, clásico formal, bailes callejeros, danzas tribales, lo urbano y lo pop, el jazz. Lo nuevo y lo viejo. Abreva en todo los movimientos para unirlos con sello propio.
Dentro del delicado programa destaco, porque a mí me gusto y emocionó, Bliss, con coreografía de Johan Inger. Esta performance fue la vida misma contemporánea, pero sumados a las corridas, a la falta de tiempo, a las relaciones cambiantes, a las redes sociales, hay una corriente feliz que todo lo une. Corremos, pero hacia la amistad, hacia el amor, hacia la aventura, hacia las pasiones. A veces nos confundimos en la solemnidad de estos géneros, evitamos disfrutarlos haciendo un esfuerzo por entenderlos. Bliss, fue eso, la felicidad del movimiento, el agradecimiento. Además el inteligente y aparentemente espontáneo uso del fondo del escenario pelado, que dejaba entrever la intimidad del teatro apenas iluminado.
En este punto me quedo pensando tantas cosas, y si algo te inspira, no cabe duda de que es bueno. Pienso en un Municipio o Región como Reggio Emilia que invierte no poco en algo tan sublime, pienso en los municipios de mi país, invirtiendo en rock, en cumbia, en murgas…
Pero bueno nos despedimos de la temporada de Nuova Harmonía 2017 felices y agradecidos, al buen gusto de Elisabetta Riva y todo el esfuerzo que pone El Teatro Coliseo para mantenernos actualizados disfrutando de la excelencia de todo el mundo.