Lo que quisimos ser (Argentina/2024). Dirección y guion: Alejandro Agresti. Fotografía: Marcelo Camorino. Edición: Glenda Daus y Alejandro Soler. Música: Leo Caruso. Elenco: Eleonora Wexler, Luis Rubio, Antonio Agresti, Carlos Gorosito, Juan Carlos Kuznir. Distribuidora: Cinetren. Nuestra calificación: excelente.
Lo que quisimos ser es un réquiem íntimo, un adiós poético que Alejandro Agresti transforma en cine: la despedida de una Buenos Aires detenida en el tiempo y un homenaje al sentimiento en su forma más pura y efímera. La película es un espejo donde cada espectador ve reflejado algún rincón olvidado de su propio corazón, un amor que alguna vez tocó y dejó ir, un momento atrapado en el claroscuro de una vida que, como las calles de la ciudad, inevitablemente avanza hacia su propio crepúsculo.
Agresti construye aquí, con Inés (Eleonora Wexler) y Yuri (Luis Rubio), dos almas que dialogan más allá de sus palabras, dos reflejos de un Buenos Aires que parece suspirar junto a ellos. Sus encuentros en cafés antiguos y cines casi desiertos son más que escenarios; son santuarios de una vida que parece llegar al final de su camino. La ciudad, en su decadente elegancia, se convierte en un testigo silencioso de esta historia de amor que podría ser la de cualquiera. Bajo la luz suave y melancólica, nos recuerda que la vida es tiempo, sí, pero también es un tránsito hacia algo más profundo y dolorosamente bello: el amor.
Al ver esta película, uno siente que todo está dicho, que ya no queda nada más que esta verdad desnuda y serena que Agresti nos pone frente a los ojos. En Wexler y Rubio, en cada mirada de Inés y Yuri, en cada palabra susurrada y en cada silencio compartido, está la certeza de que el amor y el final se entrelazan de maneras que pocas veces llegamos a comprender. La muerte, en este sentido, no es solo el final inevitable, sino ese último acto de amor que vive en la memoria de cada historia que hemos tocado. En el mundo de Agresti, el final no es un destino trágico, sino una especie de cierre poético, un recordatorio de que cada amor y cada vida tienen su propio réquiem.
Este film es un viaje hacia el último pasaje de la vida, donde la nostalgia y el deseo se encuentran en un abrazo silencioso, y el amor se convierte en un eco de lo que alguna vez fuimos, de lo que todavía llevamos dentro. Lo que quisimos ser no es solo una historia de amor; es una meditación profunda sobre lo que significa vivir y, quizás, amar hasta el último instante.