Mylch: el Musical de las Confesiones – Paseo La Plaza

0
692

“MYLCH” de Sol Levinton y Sebastián Meschengieser. Protagonizada por Edu Blacher y Emmanuel Degracia. Ambientación: Vanesa Abramovich. Música Original: Eduardo Blacher. Diseño de realización de títeres: Gladis Garnica. Fotografìa y diseño de artes gráficas: NoreStudios. Prensa & difusión: Alfredo Monserrat. Asistente de dirección: Gastón Dufau. Dirección General: Daniel Fernández.

Las funciones se realizan todos los jueves a las 20 hs. en la sala Cortazar del Paseo La Plaza. Av. Corrientes 1660. CABA.

En la bulliciosa Buenos Aires, surge «Mylch», una pieza teatral y musical magistralmente creada por Sol Levinton y Sebastián Meschengieser. En este montaje, la música se convierte en el intérprete silencioso de los oscuros relatos que los clientes del bar traen consigo.

El escenario, embriagado por la melancolía y la intriga, se convierte en un santuario para las confesiones. Mylch, el pianista anclado al banquillo, se erige como el catalizador musical de las historias entrelazadas en un enjambre de deseos y miedos.

Las piezas interpretadas por Edu Blacher y Emmanuel Degracia no son solo música, son la voz de las almas atormentadas que buscan refugio en sus notas. Blacher, con su habilidad interpretativa, y Degracia, empujando la narrativa con maestría, tejen un tapiz de emociones crudas y reales.

Pero «Mylch» no es simplemente un espectáculo, es un espejo. Un reflejo desgarrador de los propios miedos y deseos de cada espectador, presentado con maestría teatral y musical. Las composiciones inéditas que surgen en este escenario logran emocionar, sorprender, inspirar y conmover a su audiencia con una honestidad «brutal».

La música, provocativa y apasionada, es la herramienta que despierta el inconsciente de aquellos dispuestos a escuchar más allá de las notas. La ambientación cautivadora de Vanesa Abramovich, el diseño de realización de títulos de Gladis Garnica y la visión artística de NoreStudios se conjugan bajo la dirección magistral de Daniel Fernández.

En resumen, «Mylch» no es solo una obra de arte teatral y musical, es un viaje sensorial, un diálogo íntimo con las profundidades de la psique humana. Una experiencia que desafía al público a enfrentar sus propias emociones y secretos, todo al compás de las inquietantes melodías de Eduardo Blacher.

En cada acorde, en cada suspiro, «Mylch» invita a sumergirse en el laberinto de las emociones más crudas y auténticas. Un encuentro con la vulnerabilidad humana que resuena mucho después de que las luces del escenario se hayan desvanecido.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí