Conductor MARCO ARMILIATO Director CLAUS GUTH
Stage Design ETIENNE PLUSS Costume Design URSULA KUDRNA
Choreography SOMMER ULRICKSON Lighting OLAF FREESE
Video ROCAFILM
Turandot ASMIK GRIGORIAN Calàf JONAS KAUFMANN
Liù KRISTINA MKHITARYAN Altoum JÖRG SCHNEIDER
Timur DAN PAUL DUMITRESCU Mandarin ATTILA MOKUS
Ping MARTIN HÄSSLER Pang NORBERT ERNST
Pong HIROSHI AMAKO
La puesta en escena de Turandot en la Ópera de Viena no es para los débiles de corazón. Olvídate del dulce final de cuento de hadas; esto es un viaje a la mente perturbada de una mujer traumatizada. Asmik Grigorian como Turandot y Jonas Kaufmann como Calaf dan vida a una oscura reinterpretación de los personajes, alejándose de los convencionalismos morales y llevando al público a un escalofriante mundo de crueldad y desesperación.
©Turandot / Ópera Estatal de Viena
Claus Guth, el director, desafía las expectativas al presentar una visión cruda y brutal. Las cabezas ruedan y la sangre fluye, sin concesiones ni suavizamientos. La representación, aunque perturbadora, consigue transmitir la profundidad de la psique de Turandot, interpretada por Grigorian, cuya aparente inocencia contrasta con su perturbadora propensión a la violencia.
Es un espectáculo desagradable, sí, pero eso es exactamente lo que Guth busca lograr: mostrar la realidad cruda y despiadada que yace detrás de la fachada de un cuento de hadas. Grigorian encarna magistralmente a una Turandot que, bajo su apariencia virginal, esconde un lado oscuro y siniestro.
©Turandot / Ópera Estatal de Viena
Kaufmann, como Calaf, no se queda atrás. Su obsesión con Turandot y su determinación ciega para conquistarla a pesar del peligro hacen que su personaje sea igualmente inquietante. La química entre Grigorian y Kaufmann se convierte en la clave para esta producción, reflejando una pareja perfectamente desequilibrada.
©Turandot / Ópera Estatal de Viena
Esta interpretación no busca ser bella ni glorificar la brutalidad, sino presentar una verdad incómoda. La música majestuosa de Puccini se entrelaza con la oscuridad de la trama, desafiando las convenciones y llevando al público a un viaje emocionalmente desgarrador.
©Turandot / Ópera Estatal de Viena
Si uno espera una propuesta reconfortante, no lo encuentra sino que se encuentra con la realidad descarnada. Esta producción, con sus interpretaciones ¿ideales? o ¿contradictorias?, desafia todo prejuicio, sumergiendo al espectador en la profundidad oscura del alma humana …