CLAVELES ROJOS…un alegato social sobre la «normalidad»… Autoría y dirección Luis Agustoni

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Claveles Rojos

Dramaturgia: Luis Agustoni

Dirección: Luis Agustoni

Actúan: Matías Durini, Julieta Bermúdez, Constanza Fossatti, Teresa Solana, Yamila Mayo, Miguel Lumi, Miranda Caride, Laura Accetta, Pablo Contartese, Alejandro Marticorena, Diego Gómez Leite y Ricardo Levy.

Asistencia de producción: Diego Gómez Leite

Teatro Metropolitan Sura

Funciones: Miercoles 20 hs

Basada en una historia real, Claveles Rojos, nos muestra la historia de una muchacha (Liliana) vulnerable, con una discapacidad intelectual que no le impide tener en claro que no es justo lo que su familia intenta hacer con ella: declararla insana y despojarla de sus derechos patrimoniales. Inocencia, ternura y firmeza son los rasgos salientes de Liliana, quien no está dispuesta a dejarse arrastrar por los mandatos de su familia y los de una madre filicida. Ella misma entra en contacto con un abogado que se identifica con ella, decide defenderla y mediar como tercero, representante de la Ley, para rescatarla de una madre enloquecedora como mortífera. Sensible y muy frágil por afuera, Liliana es una mujer segura de sí misma. Con una fuerza interior que pocos podrían demostrar, se enfrenta a los prejuicios de todos. La puesta se desarrolla con una escenografía despojada que oficia de estudio jurídico, de juzgado y de sala de interrogatorios de Tribunales. Una mesa, dos sillas, una biblioteca; no hace falta más; el discurso y las interpretaciones son tan sólidos y efectivos que pueden funcionar incluso en un espacio vacío. El relato avanza y se va desvelando una trama oscura que, poco a poco, la protagonista llena de luz. El texto del propio Agustoni prescinde de adornos y giros complicados, desnuda en cada frase la crueldad de las sociedades que buscan resultados. fáciles y tienden a favorecer al poder, silenciando a las Lilianas que deambulan buscando justicia o reclamando igualdad de derechos.

Julieta Bermudez – Matías Durini

El emerito director teatral Luis Agustoni, lleva este alegato emocional de forma “superbe”, pero claro, se necesita para el rol de Liliana, una actriz que sepa fluir desde su composición física a su emoción gestual, pueda transmitir el gran caudal que posee el rol. Julieta Bermudez, es Liliana Doblas, de manera atrapante, con todos sus tips de composición lo cual demuestra su gran escuela actoral, que lleva a flor de piel la ternura del personaje.

Como su partenaire ideal, nos encontramos en el rol del Dr. Millan a Matias Durini, el cual va en un crescendo escénico. Posee ese don de romper junto a Bermudez la cuarta pared con el espectador y poder emocionar al espectador con los excelentes diálogos escritos por Agustoni.

Los demás compañeros de escena se proyectan en diversos personajes que bajo la dirección de Agustoni, poseen la excelencia de apoyar la acción dramática de los dos protagonistas.

En definitiva, un gran alegato teatral en donde se plantea como lo normal puede estar al límite de la cordura y, por el contrario, lo que es presuntamente anormal, podría llegar a no serlo.

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