Desde su juventud, Arthur Elgort sintió una incesante pasión por capturar los momentos más expresivos de su entorno. Aunque inicialmente intentó plasmarlos a través del dibujo, pronto comprendió las ventajas que la fotografía ofrecía como medio para transmitir la realidad. Su paciencia y perseverancia no tenían igual. Día tras día, perfeccionó el arte de la fotografía dinámica hasta que, en 1971, recibió un contrato para colaborar con la prestigiosa revista Vogue.
Su fama mundial se despegó con una fotografía icónica tomada en 1976, en la que Elizabeth Taylor quedó inmortalizada en un momento de profunda introspección. La captura de su belleza en ese instante de concentración interna le dio vida y pasión a su mirada.
Este trabajo marcó el inicio de la era de las fotografías dinámicas, en las que el viento tenía un papel fundamental. El estilo distintivo de Arthur Elgort se centraba en la utilización de luz natural, poses informales y movimientos que se dirigieron hacia el horizonte. En sus obras, no encontrará modelos congelados en poses incómodas o excesivamente maquillados. Las mujeres retratadas por Elgort irradiaban modernidad, vitalidad y una increíble feminidad. Aunque aparentemente desenfadado, su trabajo reflejaba una profunda dedicación, respaldada por un impecable sentido de la belleza.
Una de las tomas más revolucionarias de la industria de la moda y la fotografía urbana fue aquella bañada por el sol y acariciada por el viento. En ella, una joven conducía un descapotable, con su cabello ondeando al viento y su codo asomando casualmente por la ventana. Sin embargo, lo más destacado de la imagen eran sus ojos, mirando hacia el horizonte, llenos de un sentimiento vivo, un fuego y una pasión indescriptibles. Su naturalidad y calidez interior evocaban una simpatía involuntaria. La combinación de colores de la tapicería del automóvil, la ropa, el cabello e incluso el reloj de un extraño conferían un encanto especial a la imagen, con todos los tonos de beige y marrón resplandecientes en la foto.
Las obras de Elgort fueron publicadas con entusiasmo por revistas tan destacadas como Mademoiselle, Glamour y Rolling Stones, entre otras. A sus 83 años, el titán de la fotografía de los años 70 sigue activo, colaborando de manera inquebrantable con Vogue.